miércoles, 22 de octubre de 2014

ARTÍCULO | “De vez en cuando, sigo teniendo la sensación de que le debo un ascenso a Montilla” Israel Pampín

“As long as I’m living, I’ll be waiting. As long as I’m breathing, I’ll be there. Whenever you call me, I’ll be waiting. Whenerver you need me, I’ll be there…” La voz de Lenny Kravitz se cuela en sus oídos, mientras se escribe solo el epílogo de su etapa como jugador de baloncesto. Desde un tren camino de la India, Israel Pampín nos ayuda a repasar su envidiable trayectoria deportiva. 17 temporadas y un total de 7 equipos, poniendo un punto y final en el club que le vio crecer, y con el que vivió sus mayores éxitos deportivos (Palma Air Europa).

Ha decidido descansar -pues los años (35) pesan, nos cuenta- y emprender una aventura por Asia, para así disfrutar de su otra gran pasión, la fotografía. Y todo, tal y como dice la canción, a sabiendas de que el baloncesto, de un modo u otro, le esperará a la vuelta.

De entre esos 17 años, Pampín solo pasó una temporada en las filas del Club Baloncesto Montilla. No obstante, desde aquella campaña de 2003/2004, y gracias a su innegable entrega y empatía, paso a ser uno de los jugadores más queridos del club. En su memoria quedan infinidad de anécdotas y momentos. “Me llamaba mucho la atención, que el padre del presidente hiciera los bocadillos en los desplazamientos largos. Era entrañable”.
Un sinfín de historias, que transcurrieron durante una temporada magnifica, sobre todo en lo deportivo. Aquel equipo formado por Manuel Camacho, José Antonio Cazorla, Alberto García-Cuevas, Antonio Franco, Lorenzo González, Víctor Luque, Carlos Luque, José María Martin, Antonio Mariscal, Ander Ortiz de Pinedo, Efren Villareal, y el propio Israel Pampín, y entrenados por Rafa Gomáriz, brindó a la ciudad de Montilla un año de ensueño. Aunque aún así, en su mente queda grabada una pequeña espina, la del ascenso. “De vez en cuando, sigo teniendo la sensación de que le debo un ascenso a Montilla”.

Con 35 años, Israel hace un alto en el camino, y amablemente nos atiende a pesar de la lejanía. Excelente profesional y muy probablemente un gran entrenador en un futuro próximo. Y además, y como he dicho anteriormente, un magnifico fotógrafo. Esto es lo que es nos cuenta:
P- Puede presumir de una trayectoria envidiable, con un total de siete equipos alternando LEB Plata y EBA ¿Cómo evaluaría su carrera deportiva?
R- La valoración es muy positiva, empecé a jugar en el patio del colegio y nunca imaginé dedicarme profesionalmente. De hecho, he terminado jugando en el club del mismo colegio donde comencé, y casi lo hago en LEB Oro.

P- Según he podido saber, su último club, el Palma Air Europa, intentó hasta el último momento que renovase ¿Cuáles fueron los motivos principales que le hicieron tomar la decisión de, como se suele decir, colgar las botas?
R- La decisión no se tomó de un día para otro, es un tema que los últimos veranos rondaba por mi cabeza. La última parte de la pasada temporada fue muy dura físicamente. Arrastré una fascitis plantar, lo que me impedía trabajar día a día al nivel que me he autoexigido siempre. Esta temporada hubiera sido muy dura y exigente. Creo que hay que saber parar y yo me he parado. No sé, si realmente la renovación era una posibilidad. Al finalizar la temporada tenía muy claro qué no seguiría y así se lo comuniqué al club.

P- Entre sus mayores éxitos, se puede nombrar el ascenso de EBA a LEB Plata con el Palma Air Europa, y las dos últimas temporadas en Plata con el club ¿Con qué momento de todos los que ha vivido se quedaría? ¿Qué sensaciones recuerda de aquello?
R- Guardo un gran recuerdo del quinto partido en Málaga para conseguir el ascenso. No menos importantes fueron los ascensos anteriores con Alcudia Aracena, el primero en categorías FEB y con Basquet Mallorca, tras descender administrativamente el año anterior.

P- A pesar de la brevedad de su estancia en el Club Baloncesto Montilla (2003-2004), usted es uno de los jugadores más queridos que ha pasado por el club ¿Cómo recuerda aquella temporada?
R- Recuerdo Montilla muy cariñosamente. Aterricé en el club de manera extraña, agotando previamente cualquier opción de fichaje por un equipo LEB y eligiendo un club de EBA lejos de casa. Y nada más acertado que aterrizar allí. Desde el inicio me sentí como en casa, querido por el público y por el club. Los resultados deportivos hicieron que viviéramos una temporada de ensueño, que no se pudo completar con el ascenso deseado. De vez en cuando, sigo teniendo la sensación de que le debo un ascenso a Montilla.

P- ¿Alguna persona en especial?
R- Aparte de la buena relación que tuve con mis compañeros, mantengo el contacto y la amistad con Rafa Gomáriz, el entrenador, y con una persona de fuera del club en esa época, pero siempre ligada al baloncesto como es Paco Vílchez.

P- ¿Cuál es el mejor recuerdo que guarda de Montilla?
R- El cariño de la gente y su implicación en el momento de apoyar al equipo durante los partidos. Montilla está entre las mejores aficiones de España, sin ninguna duda.

P- Volviendo al baloncesto balear, muchos grandes jugadores han salido de allí en los últimos años (Rudy, Llull, Abrines, Corbacho…) ¿Cómo se explica que aun no cuente con un equipo en la máxima categoría?
R- Es la pregunta que se hace todo el mundo en Mallorca. En mi opinión, los proyectos que pudieron consolidarse, no tuvieron la continuidad ni la paciencia necesarias. En los últimos años, varios proyectos han priorizado la inmediatez sobre la solidez, y no salieron airosos de este planteamiento.

P- En referencia a esto ¿Qué opinión tiene usted sobre la crisis actual de la ACB (impagos, equipos a punto de desaparecer, desajustes presupuestarios…)?
R- Es una pena que no se regule, de alguna manera, la gestión de los clubes. De este modo se favorece que pocos equipos compitan por el título y que, un gran número, compita por no descender. Es un problema que arrastran todas las ligas europeas y con pocas soluciones a corto plazo.

P- ¿Se puede vivir bien del baloncesto en España, sin ser una estrella de la ACB?
R- En mi caso puedo decirte que, como tengo la gran suerte de no tener hipoteca y dado que no tengo hijos, he podido vivir durante 17 temporadas, con algunos altibajos, del baloncesto. Si no hubiera sido así, dudo que hubiera alargado tanto mi carrera como profesional.

P- En sus inicios, usted coincidió con Paco Olmos en el Basquet Inca ¿Cómo es Francisco Olmos? ¿Qué piensa de su situación actual, y de su participación en la Copa del Mundo como seleccionador de Puerto Rico?
R- Como bien dices, en mis inicios, coincidí unos meses con él, en el ya desaparecido Basquet Inca. Tengo que decir que tenía 18 años y mi capacidad de análisis de entonces era bastante reducida. Recuerdo su sinceridad a la hora de aconsejarme un periodo de maduración en alguna liga menor a la LEB (entonces sólo había una) y eso me sirvió de mucho. En cuanto a su situación actual, simplemente decir que pone de manifiesto el gran nivel de los entrenadores de nuestro país y me imagino que participar en un mundial de baloncesto debe ser una experiencia muy enriquecedora.

P- Y para ir terminando, ¿Tiene pensado seguir unido al baloncesto?
R- A medio plazo, esa es mi intención. De momento me he tomado un año sabático y estoy viajando por Asia. Esta entrevista la estoy escribiendo desde un tren en la India. Cuando vuelva, veremos...

Cristian López

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Enhorabuena a Cristian López, creo que esta página puede dar un gran salto mientras tú nos ofrezcas artículos como este.

Franky dijo...

Como jugador muy bueno, como persona mejor, sin duda uno de los mejores años que he podido disfrutar en un equipo de baloncesto por todo lo que rodeaba al club, un abrazo desde Córdoba